El sector progresista del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) está considerando la posibilidad de dimitir en bloque, lo que pondría en riesgo el número mínimo de 11 vocales necesarios para que las decisiones del Consejo sean válidas. Esta situación se debe a la renuncia de la vocal Concepción Sáez, la cual aún no ha sido aceptada por el presidente interino del Consejo, Rafael Mozo. Según fuentes del órgano, algunos vocales progresistas estarían dispuestos a seguir los pasos de Sáez si es una decisión conjunta, ya que consideran que una salida escalonada dejaría al Consejo en manos del bloque conservador. Por otro lado, existe la preocupación de que la dimisión de los 8 vocales progresistas pueda paralizar el CGPJ al no alcanzar el ‘quorum’ necesario.
Actualmente, Rafael Mozo tiene sobre la mesa la carta de renuncia de Sáez y está previsto que la aborde en el próximo Pleno ordinario del 30 de marzo para decidir si la acepta o la rechaza. En la carta, Sáez plantea su renuncia como «ineludible» debido al excesivo tiempo que lleva el CGPJ caducado y a la incapacidad de tomar determinadas decisiones en el ejercicio ordinario de las competencias del Consejo.